Talk Talk Read Tead @Libre

Cuando ya tenía casi todo preparado para lanzar el nuevo concurso dentro de la franja de emisión de mi programa por la radio, descubrí que el rotor del panel de mezclas se había roto y despegado. Este hecho me sumió en una colérica rabia interna. Me levanté hastiado de la silla del estudio y al no poder emitir me salí de la sala de grabación dando un portazo tras apagar el micrófono. Por suerte en esta emisión, no estaban el resto de mis colaboradores, de haber sido así, habría corrido la tristeza y furia a partes iguales. Al no poder transmitir nada de lo que tenía grabado solo dejé el espacio abierto con una vieja grabación de los altavoces cerca del micro, algo aburrido pues no era mi programa, pero al menos era mejor que nada de ruido o silencio.

Me senté frente al ordenador del estudio y me puse a hacer unos flyers para lo que iba a anunciar por la radio, y cuando los terminé los recogí de la impresora que teníamos en ese estudio. Al encontrarme solo en el estudio, me tuve yo mismo que ocupar de repartir los panfletos. Pero quizás el paseo que me tenía que dar me aliviaría.

Paseé por los pasillos de la salida del estudio, colgando uno en cada uno de los tablones de las alas de la U, pero tras empapelar la planta 1, bajé hasta la planta baja y me dirigí a la cafetería, donde más gastaría... Cambié rápidamente de opinión al oler el aroma del café de las máquinas, mejores que en el Starbucks.

- No hay prisas...- Me dije como si lo único que necesitase fueran ánimos, guardé mis flyers en el bolsillo trasero de mi pantalón y me puse en la cola para comprarme un Latte Macchiato.Los tenía de todos los colores que había en la U, rosa, azul, celeste, verdes, naranjas, amarillos, colores sobre los cuales la tinta negra fuera visible

Resaca. “Hermosa” sensación de que un taladro te martilla la cabeza. Todo te da vueltas, tus ojos están pesados, y ni que hablar el ánimo de porquería que uno podía llegar a tener. Como yo, aquella mañana que amanecí, aunque para mi eran como las 6, eran las 10 am, apague el despertador. Aquella noche me quede en la fraternidad, mi estado de ebriedad no me permitió manejar tan lejos hasta el loft donde convivo con mi compañero de piso y líder de los Kappa Tau, Mike Shepherd.

Ni siquiera la ropa me había cambiado, y no tenía otro cambio de vestuario, por ello rondaría de pantalón de vestir, zapatos negros y camisa blanca, el saco lo iba a dejar en el dormitorio. –Perfecto, no tengo ropa…- observe el mi celular y tenía 3 mensajes de textos y una llamada perdida. –que carajo…- pasándome la mano por el pelo y entre abriendo los ojos encandilados por el brillo de las letras que aparecían en los sms decían “¿Leo dónde estas?” otro “En 10 empieza el examen de Álgebra” ahí me desperté del todo apresurándome, termine de leer el ultimo “Le dije a la profesora que te esperara que tuviste un leve incidente, pero apresúrate, no me dejes mal visto” entre el último mensaje de texto y la llamada perdida habían 10 minutos de diferencia –mierda- maldije y Salí corriendo de la fraternidad, cogiendo mi auto y manejando a gran velocidad.

Llegando al salón, todos estaban concentrados haciendo su examen, cuando entre, algunos levantaron la mirada, y la profesora señalo donde estaban las hojas “-si tiene alguna duda O’Donell consúlteme en privado-“suspire, camine a paso firme, tome una hoja y me senté a hacer mi examen. Por suerte no era difícil, puros cálculos. Me llevo una hora, pero fui de los últimos en salir.

Saliendo de dar el examen, fui a la cafetería, necesitaba tomar café y comer algo, tenía hambre y mi estomago “se quejaba” haciendo sonidos. –ohm… necesito alimento…- entre a la cafetería y para mi suerte estaba un cuate mío, El “Thony” Lyon. Me acerque a este, y saque de sus manos el café que se notaba recién había comprado –es mío, tu invitas- le di un sorbo y me senté en una mesa –cómprame algo de comer Thony, te lo pagaré luego- le dije poniéndole ojitos dulces.


________________________
U. si lo tenias reservado, te jodes, ya me pasé.

Tratando de luchar con mi resaca, lo primero que hice fue ventilarme un rato saliendo al exterior y no estar encerrado, eso es malo, mas aun para un joven como yo. Por eso y porque tenía que volver a Brown, Salí de la fraternidad, quedándome allí pues no podía siquiera coordinar mientras manejaba mi auto con tanto alcohol en la sangre. Aaron me había avisado que tenía que dejar de tomar tanto y no recordar lo que hice el “día anterior” pero no podía, el alcohol era mi vicio.

Encontrándome a Anthony Lyon, un chico de la fraternidad Sigma Alpha Épsilon, me apodere de su café que tenía en manos. No nos conocíamos tanto, pero el tenia un proyecto de radio en Brown y yo propuse trabajar con él y volver a levantar mi reputación que mi ex novia había dejado por el suelo. Este pudo haberme quitado el vaso, pero gentilmente accedió a no hacerlo.
Recostándome mi mejilla en mis brazos que estaban sobre una de las mesitas de la cafetería, tome un trago y lo único que quería era dormir. Pero los horarios no me permitían darme ese lujo.

Anthony se sentó junto a mí, o en frente, se que movió la silla y se sentó, pero no lo mire, y este traiga algo de comer. –Gracias eres buena onda- llevándome la dona a la boca sentí que algo no iba bien -¿y esto?- me desperté del todo un poco amargado -¿Qué clase de porquería venden en esta pocilga?- aventé la dona a la basura, odiaba lo agridulce, luego le di un sorbo al café y mire a Anthony –cuéntame como va tu proyecto de radio, ¿muchas entrevistas? ¿Pasaras música? No te olvides de tu amigo Leonarth, puedo tocar en vivo si quieres- comente emocionado, me gustaban estas propuestas que tenia Brown de hacer un cambio.

Dejando el vaso de plástico ya por la mitad de su café saque de una máquina expendedora un pastel de naranja. Desenvolví el envoltorio, avente este a la basura y comí aquel manjar exquisito –esto es mejor que aquella porquería, nunca como en este lugar, las pocas veces que vengo es a tomar café, no aguanto venir en la mañana a estudiar wey, es un asco venir- terminando de comer, pues como bestia lo acabe en dos bocados volví a repetir mi interrogante anterior –cuéntame de la radio, quiero saberlo todo, quienes participan, que segmentos tendrás y eso- Me mostraba interesado.

Enseguida volvió la maldad a mi cabeza. Marshall Mounier –tengo una primicia para ti, ¿conoces a Marshall Mounier? El chavo trabaja en una cafetería y se rumorea que siempre lleva consigo sustancias ilícitas, ¿las pondrá en las bebidas de sus clientes? ¿Tu qué crees?- como victima de Mounier quería ver que opinaría Lyon con respecto a este tema tan delicado y a su vez explosivo para lo que refiere a un programa de radio. -si quieres algo potente para tu programón, espero sepas jugar bien al juego de los medios, una palabra equivocada y terminas en el hoyo negro- Nunca me metería a ser locutor de radio, ni conductor de televisión. Admiraba a Anthony.

Comiendo de mi pastel de naranja pregunte a Anthony sobre su programa de radio aquí en Brown. Lo cierto es que aun no eh tenido tiempo de escucharlo, siquiera de participar como me había propuesto hacerlo. Y me sentía mal porque Anthony le pone fuerza a su programa por lo que me confirmaban mis compañeros de Brown que le escuchan. –no me perderé tu próximo programa, aun no te eh escuchado en vivo, ¿tienes alguna pagina web con programas viejos grabados? Me gustaría escucharlos, o ver entrevistas, a veces me da por ver ese tipo de cosas, aunque no soy mucho de los cotilleos baratos, lo escucharía solo por que eres un buen chavo- A lo mejor hoy o cuando sea su próximo programa al aire lo escuchare. Eso seguro.

Propuse hablar de Marshall, pero se noto en sus ojos el miedo, pero no por Marshall, o quizás sí, pero a lo que me refiero es quien no le tendría miedo a Karkarov cuando el futuro de todos está en sus manos. Bueno existe si alguien que no le tiene miedo. Aaron Ryder. Su nueva mano derecha por orden judicial. –está bien, entonces lo tuyo es hacerle competencia a la chismosa y mentirosa de Gossip Girl, tengo ciertas dudas de quien pueda ser, pero eso te lo dejo a ti si realmente quieres averiguarlo, no por mí, yo tengo mis métodos, pero sé que eres buen investigador Lyon, igual me importa poco quien sea ella, habla por hablar y no da la cara a mostrarse para defender sus irónicos e irrelevantes comentarios- terminando de comer mi pastel, tome un poco mas de café –que bueno esta esto, y lo mejor es que no tiene sal- mire con aire de gracia a Anthony, pues lo que yo tomaba era suyo anteriormente.

La verdad no conocía mucho a Anthony Lyon. Ahora se estaba volviendo popular por su programa. Y eso me agradaba. Pues las personas con las que me rodeo siempre son carismáticas y/o populares, incluyéndome. Siendo yo parte de la Elite poderosa de Brown, todos nos conocían. –Thony, y si te arriesgas a hacer una pregunta algo… fuerte, como por ejemplo…- me acerque hacia este para susurrarle sin perder el contacto visual para ver que generaba mi pregunta en sus ojos y además no generar incomodidad en los demás aquí presentes -¿Qué paso con la Logia?- me enderecé en mi silla y termine mi café –pero claro, puedes hablarlo como un mito urbano para que Karkarov no se entrometa en ello y termine cerrando tu radio- acaricie mi mentón y me quede pensando algo mas, pero me arrepentí y no lo dije.

Me levante de mi asiento y tire el vaso de plástico en la cubeta –bien Anthony, ¿ estarías interesado en interrogar al líder del equipo de natación y sub jefe de la fraternidad Kappa Tau, además del más guapo de Brown?- él había sido bueno conmigo y yo le devolvería el favor, aquel fuerte café me hacia bajar el dolor de cabeza enseguida y ya podía pensar más fresco –bah, si quieres, pues no sé si te enterasteis que en el blog de la chismosa hay un publicado que dice que soy gay, ¿te gustaría saber la verdadera historia? A menos que claro, quieras seguir haciendo chismes baratos y la mayoría mentirosos como los de la cotillera Gossip Girl- me gustaba jugar con mis palabras y convencer a los demás. Anthony era una fiera en potencia, y tenía que alimentar su apetito de alguna manera.

Si bien mi intención de venir aquí a la cafetería a beberme un buen café y no el simple que hay en el estudio, además de entregar unos cuantos flyers que aún seguían en el bolsillo de mi pantalón, acabé sentándome con el segundo al mando de los incorformistas y rebeldes de Kappa Tau, aunque era el segundo al mando, era mayor que el líder de ellos, pero según sé, Leo no se mezcla entre la clase media y becados. Y quizás si le proponía para ser invitado en mi programa de radio, afectaría a mi audiencia.

- ¿Sobre mis podcasts? Pues sí, los tenemos colgados en el foro de la radio...- Ya que él sacó el tema de la radio opté por entregarle uno de los panfletos. Me levanté un poco de la silla y los dejé en la mesa, acercándole uno para que lo viera. - Ahí tienes el número del programa, así como los datos de contacto en el límite inferior, lo que viene siendo el face, el mail, twitter.... todo.- Ese era el panfleto que habia ido colgando por todas las plantas cercanas del estudio, íbamos a hacer un concurso musical con las fraternidades y si no había público de nada serviría. - Generalmente solemos pillar a alumnos desprevenidos y les hacemos entrevistas flash, y en otras ocasiones invitamos a alumnos o profesores a que vengan al estudio para hacerlo en directo.- Asentí mientras me cruzaba de brazos antes de darle un nuevo sorbo al Latte.

- No te creas, nunca he pretendido hacerle la competencia a esa mujer, si es que se trata de una mujer, su vida me interesa más bien poco.- Negué con la cabeza y me encogí de hombros, arrugando un poco mi nariz. - En el programa no sacamos lo peor de cada lugar o evento como hace ella, nos dedicamos a entrener, vale que algunas veces hallamos desvelados bombazos como quién se acostó con equis... pero somos legales. - Leo me propuso investigar sobre la gossip, pero como ese no era mi tema ni me interesaba pasé de él - No me interesa desenmascarar a esa chica, que haga lo que quiera con su vida. En eso me uno a ti .- Ya eramos dos los que pasábamos de ella.

Ahogué una risa en mi interior y simplemente sonreí tensando el labio cuando O'Donell mencionó de la cantidad de sal en el pastel. Hubiera sido más divertido si yo hubiera encontrado pimienta en el mostrador de comidas. Lo seguido que hizo fue hablarme de la Logia. Cierto es que ese misterioso grupo que Legalmente no existe ha hecho barbaries en la universidad, desde alumnos suspensos, vehículos quemados, hasta violencia descontrolada.

- Ciertamente es un tema que generará polémica, puede que lo use, pero no es de los principales del programa. - Comenté mirándole, mientras apuntaba con mi dedo al aire, simulando que tenía frente a mis ojos una lista de los objetivos de la radio, y las propuestas disponibles.

Miré mis flyers sobre la mesa, cogí uno y empecé a hacer un avión de papel doblando un pliegue de papel sobre otro.

- ¿ Al líder de natación? ¿ Es que los franceses saben nadar?- Comenté satírico con media sonrisa. Y me coloqué mejor sobre mi silla. La propuesta de una entrevista a aquel tipo era buena. - Sí, bueno nos hemos estado enterando por el blog de la Gossip de ese rumor que habla de tu homosexualidad... Algo que está bastante fuerte, porque las chicas que conozco están desesperadas porque sea mentira, y algunos de los chicos que conozco, les ha dado una alegría inmensa. Vamos, que de cualquier manera de que te la hayas montado, si ya eras conocido antes, ahora eres el tema de casi todos. - Nunca he llegado a hacer un estudio de popularidad de los alumnos, pero la gran mayoría de las estrellas solían ser de KT, ya sea porque siempre eran quienes movían las fiestas o porque eran unos ricachones de vida atrevida. No como los Omega que son serios, y como los Gamma que no se toman el infringir las normas de la universidad.

- Bueno, si te atreves a pasar por el colador de preguntas de la radio, pues no tengo problema alguno en entrevistarte... Hmmm Déjame mirar un segundo la lista. - Yo seré el lider del programa pero si he de ser sincero, pocas entrevistas que otorgamos las he hecho yo, ya que son Marshall u otros los que las hacen. Saqué mi teléfono móvil de mi bolsillo y comencé a jugar con su pad táctil para ver los datos que había del programa en él.