¿Juegas Beisbol? {Mike S.}

por **Marianne A. Delaigue** Mar Ene 22, 2013 4:19 pm

¿Juegas beisbol?

Mike · New York · 18:30 ·

Y ahí estábamos, los dos caminando a lo que sería una tarde de entretensión. Yo llevaba los dos bates de maderas, estos ya usados en varias ocasiones para hacer ciertos tipos de maldades. Él llevaba una bolsa de cuero, y dentro de ella sabía que se hallaban unas pelotas algo pesadas, llenas de harina en su interior y de una buena calidad en su tejido ademas de tela. Mike, un chico rubio, alto, ojos azules, una piel pálida, bien parecido, una sonrisa implacable, alguien que... no sabría como decir lo que siento por el, somos compañeros, claro, de bromas, siempre peleando y a la vez queriéndonos... era bastante rara. Se hallaba caminando conmigo a lo que sería solo una simple travesura. Él y yo teníamos planeado esto de ante mano, digo, hace un buen tiempo. Pero claro, algunas cosas como el estudio, situaciones familiares, amigos fiestas no nos daba tiempo para hacer este tipo de cosas. De seguro después de terminar acabaríamos en castigo o quizá en que cosa peor, todo valía la pena con el objetivo de pasarla bien. A decir verdad íbamos a hacer algo que siempre quise hacer desde que llegue a Brown, es decir desde el año pasado. Era algo que tenia ganas de sentir como adrenalina... romper vidrios.

—¿Y si hacemos una apuesta?— Le dije a Sheke, que era como le decía a Mike. —Para hacer más emocionante este asunto. —Le dedique una sonrisa y metí mis manos vagas en el bolsillo de mi chaqueta de cuero sintetica. —Ya sabes, el que pierde le da algo a cambio al otro.

Thanks, abi

por **Mike R. Shepherd** Jue Ene 24, 2013 4:48 pm

¿ Qué puede traer de nuevo alquien con quien la mayoría del tiempo te la pasas peleando y discutiendo de por qué no deberías de haber saludo a 'equis' de tal manera? ¿ O aconsejándote que esa cazadora no está de moda? Alguien que tiene el arrojo suficiente y la confianza de un familiar como para decirte todas tus verdades y fallos en la cara. Alquien con quien sabes que hagas lo que hagas, no lo pasas mal. Como si te vas con esa persona a a tatuarte todo el cuerpo o a hacer paracaídismo. Este tipo de juegos arriesgados, algunos dolorosos otros humillantes, pero que por muy difícil que sea, la compañia lo arregla todo.

La última de nuestras locas ideas surgió por algo estúpido... ¿En serio un mísero anuncio de seguros de autos puede llevarte a jugar al béisbol? No, eso no es el único motivo, porque no jugamos solo béisbol, nos desquitaremos con las instalaciones, porque cuando dos egos chocan todo tiembla. Y si Marianne me reta a hacerlo, por mi orgullo y mi nombre que lo hago. Poco importa que esté a apenas dos semanas que que salgan las listas de ganadores de las elecciones de la fraternidad, y antes de nos fuéramos de la uni para pasar la navidad.

-¿Qué pretendes?Mejor dicho, ¿qué propones?- Arrugué mi entrecejo y apreté suavemente los labios y miré a mi amiga, asiendo del asa de la mochila donde había preparado las bolas. Parpadeé y luego me sujeté el menton, repasando con mis dedos mi maxilar algo puntiagudo con mis pelos de tres días.
-Sabes que eso solo hace que te lo ponga más difícil, que te debo una...extrema.-Enarqué mi ceja con algo de soberbia y sonreí orgulloso mientras me humedecía el labio inferior.

por **Marianne A. Delaigue** Sáb Ene 26, 2013 5:40 pm

Apreté un poco los labios, con Mike siempre hacíamos este tipo de cosas un tanto... destructivas. Y, mas de una vez hemos apostado, a veces el gana, a veces yo, a veces rara vez empatamos. Esto era algo que hacíamos solo por aburrimiento, o por que sabíamos que nos encantaba provocarnos el uno al otro. —Hmmm. —Comencé a pensar detenidamente que apuesta hacer, solo lo propuse porque sabia que no se resistiría a la idea, vamos, ¿A quien no le gustaría romper los vidrios de su escuela o universidad? ¡A todos! a no ser que seas un ñoño que nunca odio nada de la escuela por que ama ''aprender'' malditos ñoños...
—Ya se, el que le da exactamente en la ventana del Señor D. él otro es su esclavo por un día. —Le propuse. —El esclavo no se puede rehusar a las ordenes de su nuevo amo. —La verdad propuse eso porque necesitaba a alguien a quien me ayude con mis cosas y a limpiar mi habitación, que me haga de chófer. Esas cosas... no, no, no, no lo haría a Mike... Olvidenlo.

Caminamos un poco más hasta cerca del centro de los edificios, era un pequeño lugar donde podías tomar cualquier camino y te conduciría al edificios que desearas ir, era el centro de todo. Le pasé uno de los bates a Mike y comencé a estirarme un poco los brazos e hice la mímica como si estuviera bateando. — Anímate Sheke, pronto salimos de vacaciones, las calificaciones están casi cerradas. ¿Que daño te puede hacer? —Dije todo eso con una sonrisa, de esas típicas divertidas mías.

por **Mike R. Shepherd** Vie Feb 01, 2013 11:03 am

Por ahora ninguno de los dos hemos salido heridos, a excepción de algún rasguño en las manos. Las increíbles locuras en las que nos habíamos visto envueltos Marianne y yo podrían escribirse en un libro de aventuras. Yo las metería en un diario, pero no tengo dones literarios para ello, salvo buenos exámenes, el resto es un fastidio.

- ¿ El señor D? - No estaba seguro de a quién se refería exactamente, hay tanta gente por aquí dando clases. Y no todos me dan a mi, solo conozco a varios de los míos, y alguno que otro de los que haya coincido en eventos de mi grupo. - ¿En la ventana? Eso está hecho.-Aseguré confiado, pocas veces he llegado a fallar tras los últimos intentos que había tenido con Marianne y los demás chicos del grupo de deportes. Cuando no jugabamos fútbol,practicabmos de todo.
-¿Qué pretendes? ¿que te limpie la habitación o me ligue a tu ex? JAJAJA.- Me eché a reír tras mi broma y rodé los ojos. La última vez que perdí a un reto - sin esforzarme eso sí- tuve que estar toda una semana aguantando los cotilleos de Marianne tras las clases, y ser el mayordomo personal, llevándole todas sus pertenencias de un lado a otro.

-No he estado horas llenando estas bolas para nada...- Giré mi cuello y miré a Marianne por encima de mi hombro, hacia atrás y me adelanté a ella dando grandes zancadas. El edificio principal estaba justo ante nosotros.
- Lo dicho, quien le de antes gana, no vale tirar de alarmas ni lanzarle bolas a otro.- Agregué mientras agarraba el bate y me aseguraba de que la bolsa con las pelotas no las tocara ella.

por **Marianne A. Delaigue** Sáb Feb 02, 2013 10:18 am

—Me refiero al Señor Director, yo le digo así porque suena más jovial. —Le dedique una sonrisa divertida y seguí calentando haciendo la mímica, solté un poco el bate tirándolo al piso y me estiré, no era buena en los deportes, mejor dicho, en los juegos de equipo o que tengan un valón, soy un cero a la izquierda, tengo dos brazos derechos (ya que soy surda). Pero, en juegos como el tenis, pin-pon, correr y esas cosas. Digamos, que soy mejor. Batear no se me da mal, es como jugar tenis pero con menos fuerza, la cosa esta en los pases que no se me daban bien. Mike era un atleta nato, así que me ponía nerviosa el perder y tener que hacerle de esclava, una vez yo le gane en la misma apuesta y valla que lo hice sufrir, y mucho a decir verdad. Sheke acepto el reto de darle en la oficina del Director, nos llegará el grito d la historia pero todo por un rato de entretención. —No, nada de trampas. —Lo miré desafiante, porque no faltaría que alguno de los dos hiciera que el otro se distrajera para ganar el reto. Las palabras de Mike casi me hacen ahogarme con mi propia saliva, pero, si me tire al piso de estomago para aguantar la risa sacando el pasto. — ¿Ligarte con Harry? —Trataba de un contener la risa en pequeños murmullo. —Claro, como Harry no es para nada homofóbico y esas cosas. —Me volteé quedando de espalda y di un largo respiro y luego me volví a parar terminando mi ataque de risa del piso.

Volví a tomar el bate y ya estaba lista para batear, vi como el rubio escondía un poco las paletos de beisbol, me acerque para sacar dos por atrás sin que me hubiera y no se adelantara a nada. —No seas tramposo Mike, las damas primero. —Le lance una de las que tome y la otra la deje en piso. —Lánzame una curva haber si sigues siendo un excelente deportista. —Le sonreí con malicia y ya estaba en una posición esperando la bola.

por **Mike R. Shepherd** Sáb Mar 02, 2013 7:09 pm

¿Jovial? Es un modo de decirlo, porque ese hombre no llega a los cuarenta años, tiene un excelente cuerpo y si no fuera por esa mirada de lobo que tiene y el traje de armani que usa a diario, se le podría confundir con un alumno si no se repeinara tan anticuado.

Nos entretetuvimos con unas risas mientras nos colocabamos cerca de la rectoria, en el hall que era muy amplio, además de muy alto. Era una de las pocas zonas de la universidad que en un mismo lugar aunaba las 5 plantas de altura de Brown. Bromeé con Anne sobre su ex-novio, un tipejo raro al que no llegué a tocar palabra alguna directamente, pero a mis oídos llegaron palabras contrarias de Marianne. - Si supieras que la mitad de los tíos con los que he salido también eran homofóbicos....- Comenté mientras estiraba mis brazos hacia atrás, flexionando mis hombros.

A pesar de mi intento por comenzar yo y que ella no se apropiara de este juego no pude evitar que se saliera con la suya con un refrán de tópicos.
- Pues si las damas batean antes, aquí no hay ninguna...- Bromeé mientras me iba alejando de ella con dos bolas en mi mano izquierda. Cuando me separé una distancia de 5 metros, sin subirme a ningún escalón me giré y miré a la rubia.

Eché un vistazo en derredor y me aseguré de que seguíamos solos y tras ello me erguí para lanzar la bola. - ¿Curva? Pues curva será.- Dije en alto y me moví coordinado para que tras levantar mi peso con la pierna izquierda, mi cuerpo sufriera efecto de inercia y mi brazo derecho se adelantara con más fuerza y rapidez. No es fácil darle efecto a una bola para que siga una tratectoria determinada que no sea recta, pero tras varias prácticas, he dominado esta técnica. Le sonreí y tras lanzar la bola me giré para observar si ella lograba golpearla, y si lo hacía, dónde la mandaba.

por **Marianne A. Delaigue** Sáb Mar 16, 2013 9:27 pm

Mike lanzo la curva que le había pedido anteriormente. A medida que se iba acercando velozmente hacía mi, un par de segundos antes rodeé el bate para que proyectara contra esta. La bola de beisbol salió en dirección al Hall, pero lamentablemente cayo un piso más debajo de la que estaba segura era la oficina del director, estrellándose con otro vidrio, seguro le había dado a uno de los pisos de administración o que se yo. Suspiré y pase la mano por mi frente sin decir nada más, Mike era muy bueno en esto y estaba segura que le atinaría en el primer intento, por eso me había adueñado de lanzar primero.

—Tienes una maldita suerte —mencione acercándome hacia él y quitándole la bola de beisbol que poseía en su mano. —tu turno Sheke

Tiré el bate al piso y esperé que Mike se colocara en posición para lanzar, yendo por su bate por supuesto. Volví a pasar la mano por mi frente y me daba bastante miedo que el hijo de puta se Mike me tenga de esclava, pero vamos, él sufrió una ve y ahora tendría que sufrir yo si es que no le atinaba.

—¿Qué tipo quieres? ¿Una rápida, curva, lenta, sensual, orgásmica? —Las últimas eran en broma por supuesto, fruncí una sonrisa divertida al ver su rostro al nombrar las posibilidades. —Quiero ver como respondes a una rápida, ¿te parece? —Esperaba que su respuesta fuera asertiva ya que tenía toda la mentalidad para lanzar una bola bastante feroz.

Esperé a que Mike estuviera listo para recibir –si es que podía- la bola rápida que le iba a lanzar. Me coloque de lado, levante la mirada hacia Mike. Tenía puesta la pelota de beisbol en mi mano izquierda –ya que soy zurda- y la mano derecha sobre esta, mi mirada se fijo fulminante hacía el chico, fruncí los labios mientras levantaba la pierna derecha para dar empuje a la lanzada, mi brazo se hecho para atrás y la lancé con velocidad hacia Mike, esperando para ver a donde se estrellaba.

por **Mike R. Shepherd** Miér Mar 20, 2013 9:40 am

No hubo problemas para lanzarle la bola a Marianne, porque esto se me daba bastante bien, en lo que se refiere a deportes de pelotas y balones, me defiendo. Cuando le lancé la bola a Marianne hice un amago de lanzarme al suelo con un grito de 'Cuerpo a Tierra' pero sólo lo simulé mientras veía como la bola sobrepasaba con creces mi altura y se perdía detrás de mi, aunque no en la dirección deseada. El sonido del final del vuelo lo marcó un cristal roto que sonó.

- Hay gente que nace siendo una estrella, y gente que se estrella.-Comenté sonriente en el instante que me crucé con la rubia de camino a recoger el bate de béisbol. Después de recogerlo eché un gran vistazo al interior de la universidad y a Anne que me ofrecía varias bolas. Las últimas me sacaron una gran sonrisa.

- ¡Una rápida y sensual no estaría mal!- Comenté en voz alta antes de reirme sonoramente. Las bolas rápidas como su nombre indican son más veloces de lo normal, pero mantienen generalmente - conozco a tíos que las lanzan a dónde les sale de los bajos- mantienen una trayectoria recta perfecta. Si estás en un equipo siempre te recuerdan que la posición de bateo estándar es con los pies en el suelo firmemente, la espalda recta y el cuerpo firme, yo me limité a adelantar mi pie izquierdo sobre el resto de mi cuerpo y agarrar con ambas manos el extremo del bate. Ella lanzó, y pude ver como la bola a veces desaparecía por el efecto de las luces - no las encendimos todas- pero cuando se aproximó a mi, logré golpearla con fuerza siendo este un gesto raso que rechazó la pelota, pero le imprimió una trayectoria ascendente. - Qué faena.- Me quejé mientras dejaba reposar el bate colgando de mi brazo y veía como la bola iba directa al techo y después golpeando en el suelo de la última planta. De haber una vidriera en el techo, la pelota la hubiera atravesado y serían más vidrios rotos.

- Nada, que no es mi día. Lo mismo deberíamos acercarnos más, o prender más luces, porque no veo un carajo eh, y mira que de ver esto mejor lo hubiera logrado.- Comenté cuando me acerqué un poco a Marianne. Al estar junto a ella me puse a jugar con su coleta. - Sabrás que ahora debemos de controlar las grabaciones ¿No? Porque si no quieres manchas en tu expediente, esto no ha de saberse. - No nos importó mucho cuando pensamos venir y relajarnos, que las cámaras de la universidad enfocaban a una parte de la entrada, no había guardias , y tampoco deberían de mirar las cintas a no ser que hubiera desperfectos, que los dejaríamos de seguro.

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