Astrid M. Hannibal Id.-

Nombre completo: Astrid Morrigan Hannibal
Edad: 18 años
Ocupación: Estudiante.
Grupo: Universitarios
Carrera: Fotografía
O. Sexual: Bisexual
Nacionalidad: Francesa
Cumpleaños: 12 Abril 1994

GUSTOS
#Fumar.
#Drogarse.
#Sex, bitch.
#Los tatuajes.
#El rock y el grunge
#Sacar fotos.
#Andar en skate.
#La literatura.
#Dibujar.
#Jugos de fruta tropical.
#Vodka con Coca-cola.

DISGUSTOS
#Las mentiras.
#La policía.
#Las leyes.
#El cinismo.
#La vagancia.
#Los ascensores.

MANÍAS
#Juega con sus pestañas cuando esta aburrida.
#Muerde su labio inferior cuando esta nerviosa.
#Mueve la pierna cuando esta quieta.
#Juega con su cabello cuando esta ansiosa.

ENFERMEDADES
#Bulimia.

DATOS CURIOSOS
#Cuando tenia ocho años, y se comportó como una niña malcriada y rebelde, su madre la llevó al psicologo, quien, siendo tan solo una pequeña, intento ser abusada por el, intento que se vio forzado, gracias a la entrada de una enfermera. La pequeña nunca dijo absolutamente nada, sin embargo la actitud que Astrid demostraba cada vez que su madre le llevaba al psicólogo, fue la que le dio la alerta, entonces al preguntarle porque no quería ir, ella contó toda la verdad, por lo que se estableció una demanda en su contra por intento de abuso a una menor, lo cual es considerado como Pedofilia.
#Astrid, decidió estudiar fuera de Francia debido a que su madre era una mujer extremadamente religiosa y nunca aceptó que su hija tuviera una gran inclinación tambien hacia las mujeres, considerándolo como una aberración contra las "leyes religiosas", por lo que la hecho de la casa. A pesar de ello, le dio todo el dinero que ella necesitaba para entrar a la universidad. Al viajar a Estados unidos, estuvo viviendo un tiempo con su hermano, quien se fue de la casa por voluntad propia, al no soportar las extremistas actitudes religiosas de su madre.
#Al morir su padre, la persona que lo había sido todo para ella, cayó en una profunda depresion, de la cual logro salir, gracias a su hermano, ya que su madre ni siquiera le pretaba la mas minima atención a sus propios hijos y todo ello desencadenó otra enfermedad, Bulimia, de la cual no se ha mejorado hasta el día de hoy.
#A los dieciséis años, tuvo su primer encuentro amoroso con una chica, fue ella quien le hizo ver que también tenia inclinaciones hacia las mujeres, en un mayor grado que hacia los hombres, sin embargo, se podría decir que aun no han dejado de gustarle los hombres.

Pequeños datos:
#Tiene tatuajes en varias partes de su cuerpo, los cuales se los hizo su propio hermano.
#Sabe andar en Skate.
#Aprendió a surfear a los quince años.
#Habla español e ingles a la perfección y sabe algunas palabras y frases en celta y griego antiguo. Los últimos dos idiomas, le gustaría poder hablarlos, pero le parece algo demasiado complicado.
#Tiene una perrita Poodle Toy llamada Bonnie, (Regalo de su padre,

Algunas mentes son casi imposibles de describir en orden de hacer caber en un trozo de papel, porque es siempre la mente, la encargada de guardar descripciones y prejuicios dentro de ella. Astrid posee esa clase de mente, sin embargo tiene unas cuantas características insinuantes que reflejan su psicología.

Egocéntrica: No es un escudo, una máscara, una actuación, el ego de Astrid la acompaña desde el día en el que sus ojos vieron la luz del día. La chica es orgullosa, persuasiva, ágil, nunca se verá resignada, la dignidad es su segundo nombre. Enemiga del cinismo. Odia las mentiras, y si le mientes, puede volverse en alguien vengativo y despreciable. No le gusta que la tilden de mimada, crédula, o ignorante. Camina a sabiendas de lo que es, pero no por ello se comporta miserable con los demás, no es fácil ganarse el odio de la muchacha, pero cuando lo ganas, ése sentimiento contra ti perdurará hasta el día que mueres, o incluso más… Le gusta que la desafíen, mientras más lo hagas, más importancia le das, y mientras más importancia le das, más le subes el ego. Toma mucho tiempo ganarse su confianza, pero funciona como su odio; si ella confía en ti, lo hará hasta el final, sin importar cuantas veces la decepciones.

Seductora: Sin seguridad, no hay forma de seducir, con mucha seguridad, la sensualidad la llevas siempre a flor de piel. Seducción, sensualidad, cosas muy distintas, pero que al fin y al cabo van siempre de la mano. En éste aspecto, la muchacha no tiene límites, le gusta provocar, sentirse deseada. Saca el máximo provecho a sus atributos físicos, y sin llegar a ser vanidosa, es de las mujeres sin pudor alguno, su cuerpo es la prenda más importante, vista lo que vista. Hay que saber cuidar y modelar aquella prenda, y ella lo sabe hacer. Ocultar la sensualidad es crimen, caer en su mirada hipnotizante es fácil. La moderación para ser quién es, es una censura, no forma parte de su lenguaje, esto directamente significa para ella limitación. En realidad lo que ella busca es un poco de diversión, sin importar que pase después.

Despiadada o simplemente mala. No tiene una mente asesina, no le interesa obtener sufrimiento ajeno, pero le gusta burlarse de la gente, armar caos, simplemente porque se le dio la gana. Le gusta llevar las cosas a un extremo, sólo por placer. No tiene miedo a sentir, a vivir, a morir, no depende de nadie para existir. Y al poseer tanta seguridad y decisión, conlleva a que tenga idea fija. Cuesta que se abra a ver distintas posibilidades, o que siga a alguien en voluntad propia. Le gusta la libertad, tener control sobre su vida, y a veces, por qué no, un poco de control sobre los demás.

Nacida y crecida en el seno de una familia de clase media, sumida completamente en la religión y las buenas costumbres, una conservadora y machista familia que no hizo más que atormentar a la más pequeña durante toda su vida y por ser la única hija mujer que poseían, cierto, hay muchos que darían lo que fuera por tener la atención de sus padres, pero también hay quienes tratan de tener un poco de privacidad a como de lugar. La pequeña Astrid fue criada en un colegio de monjas, durante todos esos años fue la niña perfecta, la que agradaba a todos con su simpatía, su adorable y santo rostro y por sobre todas las cosas su impecable y respetable vestidura, siempre usando vestidos largos y cintillos en el cabello, pero un momento de rebeldía puede cambiar la vida de una simple y dulce niña de doce años, a ser el demonio personificado, pegarle a sus compañeras, saltar encima de las mesas y decir palabrotas frente a las monjas, fue sin duda la gota que rebalso el vaso. No soportaba mas arrodillarse frente a una estúpida imagen y rezar, rezar y rezar incansablemente en vano, nunca creyó en la existencia de un dios, es mas ni siquiera le interesa, y siempre agradeció el hecho de haber sido expulsada de ese absurdo colegio para ser colocada en uno normal, si bien nunca logró adaptarse y fue una chica introvertida, siendo víctima de la exclusión de sus compañeras, ¿Por qué? Por rara, por culpa de su madre, por no decirle que la vida no era color de rosa y que no siempre las personas harían lo que ella quisiera. Así es, solo fue una niña tratando de encajar con los demás pero que nuca lo logró, solitaria siempre en los rincones, pasando inadvertida, estaba a gusto con ello y ya se había acostumbrado, creyendo siempre que su belleza intimidaba a las demás, pero claramente no era eso, su despreciable actitud ahuyentaba a todos., excepto a uno, ese chico que cambió su vida para siempre, que la hizo conocer la verdadera realidad que se esconde fuera de su burbuja, fuera de la burbuja en la que sus padres la encerraron. Recién a sus dieciséis años supo lo que era el amor, lo que era sentir mariposas en el estomago, sentir que darías lo que fuera por la persona con la cual estas, con la que compartes tus besos, tus alegrías, tus emociones, pero cuando toda ilusión se rompe, también lo hace tu corazón.

Un chico que te enamoro solamente para conseguir que te acostaras con el, solo por tu cuerpo, claro tu virginidad le ayudaría a ganar 100 dólares, tu supuesto novio, apostó con un amigo para ver quien se acostaba con mas vírgenes en un mes, ¿$100 te parece bajo precio para todo el valor que una mujer tiene? Pues no tienes idea del precio que el corazón roto de una joven tiene. Tu hermano Dylan, quien ha estado contigo en los momentos mas difíciles, le dio a ese chico una paliza que nunca olvidaría, eso se lo has agradecido toda la vida y para rematar este murió a causa de una sobredosis, la joven lloró su muerte, a pesar de todo lo que el le hizo, seguía amándole, pero a la vez lo odiaba, cosas así no se le hacen a una chica, menos a una que no tenía idea de lo que los hombres son capaces de hacer con tal de saciar sus estupidas necesidades. En fin, si bien fue su primer amor, fue la primera persona a la cual tuvo que olvidar, sacarlo de su corazón, de su mente, dejarlo en el pasado, es algo imposible, no puedes sacar a alguien que te hizo semejante cosa de un día para otro, al menos me consuela saber que ya no lo amas.

El amor que sientes por un novio no se compara al que sientes por un padre o una madre, incluso si esa madre nunca estuvo presente en tu vida, salvo para darte ordenes y criticarte, nunca oíste de parte de ella un “Excelente, hija” o un “Cielo, eres maravillosa” y lo que es peor nunca has oído un “Te amo”, eso es lo que te destroza el alma, pero para tu suerte tu padre siempre estuvo allí para ti, lo era todo.

Sentada en tu cama, leyendo un libro mientras escuchas música desde tu teléfono, la cual se ve interrumpida al escuchar una llamada, una llamada que cambió tu vida para siempre, te hizo caer en una enfermedad de la que muchos no se atreven a hablar, un accidente automovilístico acabo con la persona más importante que tenias en la vida, tu padre, así es, la vida no solo te negó la posibilidad de ser realmente amada si no que te quita a tu padre, tu modelo a seguir, a quien siempre respetaste defendiste por sobre todas las cosas, pero bueno la vida es así, siempre jodiéndote hasta que ya no que quedan fuerzas para seguir luchando, donde tu única solución es tomar un cuchillo o cualquier objeto con filo y auto flagelarte, recurrir a eso nunca fue lo que deseaste, pero aceptémoslo eso te hizo abrir los ojos ante algo que desconocías, es entonces cuando tus amistades se vuelven infinitas, todas persiguiendo un solo objetivo, ser alguien importante en la vida, paralelo a ella están las drogas, el alcohol y el sexo, tres cosas que pueden hacer que una pequeña niña se transforme en el mismísimo demonio, Morrigan, la madre de Astrid, fue la que más sufrió con ello, tratando de afrontar las quejas del director, las llamadas policiales avisando que estabas conduciendo en estado de ebriedad, sin darse cuenta que todo ella era para ganar su atención y lo conseguiste, tu madre se transformo completamente, siempre pendiente de tus necesidades y trató de darte lo mejor, una vida feliz, así la muerte de tu madre no fue algo tan difícil de sobrellevar, aunque, claro, eso no es algo que se olvida de la noche a la mañana.

Si, lograste alcanzar tus metas, ser alguien en la vida, estudiar en la universidad fue algo que nunca esperaste hacer, considerando también que tu madre, no hacia mas que presionarte para que trabajaras con ella en su tienda y te olvidaras de los estudios. Tu querías estudiar fotografía algo que realmente deseabas. Sin embargo -y gracias al apoyo de tu hermano- Viajaste a New York, EE.UU y estudiaste en Brown, lo que tanto habías anhelado desde que tomaste por primera vez una cámara.