El que se ria pierde! - Victorique-

La coleta de la pequeña chica se movía de un lado a otro mientras ella daba paso seguro hacia la biblioteca para disfrutar de unos cuantos libros los cuales, si bien ya había leído, no le molestaría releerlos y aprendérselos de memoria. Su paso era delicado pero seguro y ese caminar tan peculiar dejaba que el vestido delgado de estampado azul que llevaba puesto para ese ligero calor que hacía se contoneara al ritmo de sus pequeñas caderas y que este mismo se pegara a su cuerpo por la briza que se colaba entre su cuerpo.
Hacía ya una semana que había llegado de Francia y si no bien estaba totalmente aclimatada al menos ya se sabía los caminos para las diferentes aulas a las cuales pertenecía su carrera, así como a otros lugares los cuales Marie le había echo el favor de mostrárselos desde el primer día que había llegado , Al ser su mejor amiga un miembro de la fraternidad Gamma phi Rochelle busco la manera de encajar pues no quería ir y venir a la universidad , aunque el señor Adkins era todo un caballero y la trataba como una princesa a ella le daba miedo pues así como Cedric el hermano mayor de su mejor amiga, ese señor tenía una mirada tan pesada que hasta los hombros te dolerían con tan solo verlo unos cinco segundos. Es por eso que se esforzó en agradarles a sus compañeros para que la aceptaran y tuvo que dejar de lado su facha de princesa pues Marie le dijo que en la universidad se a comerían viva pero a ella aun le daba vergüenza ser tan extrovertida con todos, pero debía esforzarse con sus ya hermanos de la fraternidad y con el tiempo se abriría más y conocerían esa parte alocada e infantil de Rochelle.
Pensando en tonterías como esa Rochelle no se dio cuenta que estaba a pocos metros de entrar a la biblioteca y cuando sus ojos enfocaron esa gran puerta hermosamente tallada estos el brillaron, sonrió mordiéndose el labio inferior y dio un paso para acortar la distancia entre su nuevo lugar favorito y ella. Pero como a ella parece seguirle una nube de mala suerte un pequeño amiguito se le cruzo enfrente, una linda abeja, este pequeño animal no tenía intenciones de molestar simplemente iba pasando por ahí pero a Rochelle le pareció lo contrario y soltó un grito acompañado de un manotazo el cual hizo que la pequeña abejita se molestara por lo cual dicho animalito comenzó a seguir a Rochelle. Rochelle peleaba con aquel insecto manoteando y quejándose maldiciendo en francés , un francés poco entendible por los nervios y era tanto su nervio que no se dio cuenta como ya estaba dentro del edificio y como cruzaba las diferentes zonas de la biblioteca .La abeja seguía cazando a su agresora queriéndola picar y Rochelle seguía caminando hacia atrás con cara de angustia manoteando para asustar a ese bichito-ya!- dijo desesperada en un gritito y algo con lo que choco le hizo caer hacia atrás aplastando a alguien. Cerro los ojos al caer y los dejo así hasta que pregunto- Se fue?- abrió un ojo aun con los brazos encogidos y los puños cerrados, suspiro aliviada al no ver a ese bichito y se quedó ahí un momento sin importarle que estaba aplastando a alguien.

Terror, eso era lo que Roche sentía por las abejas, en la vida le había picado una y ella escuchaba por ahí decir a las personas que el dolor era espantoso e insoportable fue por eso que reacciono de aquella forma tan infantil, después de su tonta pregunta ella se percató de que la que la estaba sosteniendo era otra chica, la cual seguramente se había molestado con su torpeza

La pequeña chica se levantó de forma rápida con algo de torpeza- yo…como lo siento en verdad- miro su libro el cual había aplastado- Y tu libro- se tapó la boca y sonrió algo tímida- Niña de la abeja- rio un poco más y tomo la mano de la chica con sus dos manos- Mi nombre es Rochelle o Genevive, como gustes, todos me dicen Roche, o elle, muy poco me dicen Viví o Gen – hablo muy rápido en ese momento pues acostumbraba a hacer eso cuando estaba apenada y nerviosa, por suerte su acento era casi nulo pues convivio mucho con americanos así que su lengua materna no le impedía hablar fluidamente otros idiomas. La ventaja de aquel momento es que la chica que le había ayudado a no caer al suelo no parecía molesta como ella había pensado en un principio- Y tú?, cómo te llamas chica que fue atacada de improvisto por la chica de la abeja- rio un poco y se acomodó la coleta que en el arranque de pánico se le había desacomodado – de verdad no sabes cómo siento tanto lo de tu libro, si te llaman la atención no dudes en decir que yo tuve la culpa- dijo aquello último en un susurro tapando de lado un poco su boca- Si te regañan por mi culpa no sé qué haría- dijo mirando a la chica a los ojos

La morena seguía con las mejillas un poco coloradas al ver el pobre libro destrozado, si no fuera tan miedosa nada de eso hubiera pasado pero claro su tonta forma de actuar le había costado a alguien un hermoso libro – No, yo pagare la cuota en serio- dijo tomándose las manitas y acariciando sus dedos, el dinero no importaba pues sus padres tenían y gracias a esto ella tenía dinero , pero la chica la pago antes de que yo pudiera siquiera acercarme mas- hummm, esto no está bien – dije más para mi pues todavía que le había arruinado e libro ella había pagado por mi error.

Cuando salieron de ahí y la linda chica tomo el brazo de Rochelle a la pequeña e le dibujo una sonrisa en los labios – Claro que te invito lo que tú quieras, comida, helado, sodas, pasteles- se tocó el estómago- lo que sea con tal de pagarte ese error, es que todo fue culpa de la abeja- Y mientras decía lo último se giró hacia todos lados para ver si no veía alguna otra pequeña abeja que le quisiera jugar mal.

-Dime Victorique- dijo con un poco de dificultad- Me gusta ese nombre, nunca lo había escuchado antes- ladeo la cabeza y siguió caminando con ella- Que estudias? De que era el libro que aplaste con mi gran y enorme figura- eso último lo dio inflando los cachetes bromeando claro está.