Angelique Hope Levy {ID}

Nombre completo: Angelique Hope Levy
Edad: 18
Ocupación: Estudiante
Grupo: Gamma Phi
Carrera: Fotografía {Artes}
O. Sexual: Bisexual
Nacionalidad: Francesa
Cumpleaños: 29/08

GUSTOS
Perros
Comida
Fresas
Helado
Cocinar
Dibujar
Fotografías
Deportes
Fiestas
Bailar
Dormir
Lealtad
Fidelidad
Gente positiva
Películas
Cabalgar
Música
Pintarse las uñas

DISGUSTOS
Pescado
Brocoli
Mentir
Falsedad
Libros aburridos
Engreídas
Hipócritas
Llorar
Desorden
Madrugar

MANÍAS
Jalarse un poco el cabello
Tararear canciones
Morderse los labios
Golpear las uñas
Arrugar la nariz
Le gustaría ser pequeña otra vez

ENFERMEDADES
Alérgica a las calas

DATOS CURIOSOS
Si tiene un lápiz o bolígrafo en la mano, no puede estar sin escribir o dibujar algo por todas partes.
Oculta su gusto por las chicas.
Tiene un perro y un jerbo.
Canta mucho pero sólo cuando no hay nadie, pues le avergüenza.

Angelique, o Angie, como le dice a todos que la llamen, es una joven de dieciocho años como cualquier otra. Está en el promedio podría decirse. Le gusta divertirse, le gustan las fiestas, le gusta el alcohol, sí, todas esas, pero sabe controlarse y se da cuenta perfectamente cuando se está pasando de la raya y cuando debe detenerse. Sabe que está en la universidad para estudiar, pero tampoco quiere aburrirse las veinticuatro horas diarias.
Esta siempre...¿como decirlo? Llena de vida; es optimista, extrovertida, alegre y agradable con cualquiera. Algunos aspectos de ella se ven modificados dependiendo de cuanto alcohol haya bebido, vale aclarar. Rara vez se hace problema por entablar una conversación con alguien aunque ni conozca a esa persona; si está sola en algún lugar, esperando algo, alguien, o lo que sea, está aburrida, y hay alguien mas en el lugar, se acercará con una de sus bonitas sonrisas amigables a hacerle compañía.
Las personas que se la dan de rebeldes o que se creen la gran cosa le dan vergüenza ajena, por lo que prefiere ignorar a los de ese tipo, o las que son negativas en exceso y sin remedio. Piensa que la vida es demasiado corta como para molestarse con algo o alguien que no vale la pena.
Es perezosa, muy floja; sobre todo cuando acaba de despertarse, puesto que detesta madrugar y no se acostumbra fácilmente, y le molesta que apenas le hablen en ese estado.
Es una persona sumamente fiel y cariñosa, así como una niña o un gato pequeño. No le gusta admitirlo pero su mente es bastante infantil, y eso la hace vulnerable e ingenua a veces. Detesta que jueguen con ella, que le mientan, que le manden, o que desperdicien su confianza, y una vez eso pasa no la vuelves a obtener. No guarda rencores y con el tiempo perdona, pero aún así no volverá a ser igual.
Es bisexual, pero finge no serlo. Siempre ignora los malos comentarios que vayan dirigidos hacia ella, pero honestamente teme lo que dirían sobre ésto. Su familia ha sido muy tradicional siempre y sus hermanos siempre están cerca de ella, por lo que no quiere decepcionarlos ni que la vean de mala forma además de ser la menor. Ve a las mujeres mas dóciles y mejores que los hombres muchas veces, así como mas estables para quien quiera tener una relación seria, y el hecho de que ambas sean mujeres le es indiferente y que sólo es como se ve. Tampoco es lesbiana, los muchachos le atraen y mucho, y mas cuando éstos intentan llamar la atención de ella y lo logran. Angie por su parte, bajo esa apariencia de muchacha dulce e inocente sonrisa que lleva todo el tiempo, es una seductora nata, dispuesta a cualquier cosa por conseguir lo que quiere, y no se rinde fácilmente por ello.
Es un poco celosa, mucho a decir verdad, pero no lo admite. Cuida y vigila lo que le pertenece. "Ni se mira ni se toca, es mío." Si algo pasa, es propensa a exagerar, es toda una actriz en ocasiones. Pero éstos celos son verdaderamente a causa de que no tiene una autoestima muy estable, y esa es otra de tantas cosas de sí misma que oculta aunque no lo desee así.
Está feliz con la carrera que escogió, la fotografía es algo que le apasiona y razón por lo que siempre lleva su cámara profesional a todos lados, con la esperanza de toparse con alguna buena vista y conseguir una excelente foto.

Hace dieciocho veranos, en una cálida noche el veintinueve de agosto, nació una bonita niña a la cual llamaron Angelique. Fue en París, una hermosa ciudad reconocida mas que nada por la moda, el amor, y la torre Eiffel. Era la tercera y última hija de un matrimonio adinerado de aquella ciudad. Su padre era un reconocido médico y su madre diseñadora además de escritora. Tenía dos hermanos también, uno dos años mayor que ella y el otro cuatro, lo que la convertía en la menor, la mas mimada, y la única niña.
Nunca les faltó nada a ninguno de los tres y tenían una vida buena, pero nada fuera de lo normal. Los tres siempre estaban juntos y se cuidaban entre sí, aunque por supuesto teniendo las típicas peleas de hermanos.
Su padre tenía su propia clínica por lo que no pasaba mas de un par de horas en su hogar, lo que significaba que estaba muy ausente y con el paso de los años pareciera que su relación se deterioraba cada vez mas. Su madre en cambio era quien los cuidaba y estaba siempre allí, con ellos, trabajando en su hogar. Angie tomó amor al mundo de la moda por todo el tiempo que pasaba con su madre y lo que aprendía de ella, y le encantaba que ésta la llevara de compras. Siempre era celosa cuando de su madre se hablaba, le encantaba llevarse su atención por ser su niña.
En la escuela primaria era una alumna muy sobresaliente, aunque durante el secundario le costaba un poco mas y llegó hasta quedarse con algunas materias pero nada grave, era una adolescente cualquiera.
Al momento de escoger su carrera, iba a elegir diseño de modas, como desde pequeña había pensado debido al trabajo de su madre, pero cambió de idea con una cámara profesional que le regaló su padre al cumplir diecisiete años, y de a poco le fue tomando amor a la fotografía, escogiéndola finalmente como su carrera a estudiar y así fue apenas llegó a la universidad Brown. Ahora sólo queda ver que le depara el destino.